jueves, 23 de octubre de 2014

Charly



Feliz cumpleaños al AMO y SEÑOR de la música.
Porque aunque no lo quiera soy una pasajera en trance. 
Porque a cada rato recuerdo que ahora me siento mucho mas fuerte.
Porque me gusta mirar con ojos de videotape.
Por esos fines de semana que voy de la cama al living.
Por esa gente que hace de la filosofía una baratija.
Por esos días que me pegan abajo.
Porque no quiero volverme tan loca.
Por los días en que se trata de mi.
Por los dinosaurios y por los que rasguñan las piedras.
Porque con tu demasiado ego serás siempre una influencia.
Y porque todas estas frases que asi suenan horribles, vos solo las podes hacer poesía
Por todo eso, y aunque no sepa hacerlo, hoy, rezo por vos





jueves, 11 de septiembre de 2014

Si el artista no tiene algo mas en su vida, 
vive siempre atento a ese rato en que depende de la mirada del otro. 
Y depender de la mirada del otro, ademas de perjudicial, 
nunca alcanza.

viernes, 5 de septiembre de 2014

Chau Gustavo

De repente me acordé que cuando anunciaron el último recital de Soda, yo tenia 15 años. 
Fede y Lucas iban a ir, los iba a llevar Canchi, que se ofreció a llamar a mis viejos para que se queden tanquilos.
Pero no habia caso: yo era chica.
Sé que fué un 20 de Septiembre porque cuando volvió, lo senté a Fede y lo obligué a que me cuente todo y él me contó que Cerati dijo "Ya son las 12, Feliz Primavera!" y que ahi nomas cantó Primavera 0. Pero que no fué a las 12 exactas, porque tocaron mucho mucho.
Y ya a mis veintitantos, para que "sus hijos vieran a Soda" se les ocurrió volver. Un rato nomas. Y ahi si que fui.
Y bailé, hasta que literalmente no me dieron mas las piernas y quedé sentada llorando de cansancio y muy feliz.
Gracias trastornado. Ojalá esté bueno del otro lado y ojalá llegue la recompensa.
Se te extrañaba. Se te seguirá extrañando.

lunes, 5 de mayo de 2014

Cuenta regresiva

Madre siempre supo como engañarnos a mi hermana y a mi.
Un poco de teatro por aquí, un poco de mentiritas por allá.
Cuando no había un mango, disfrazaba comida hasta que parezca de Restaurant Francés y le ponía nombres como "tarta primavera". Bastante inocente era yo, claro, de no ver que dicha comida iba variando de ingredientes semana a semana, pero siempre se llamaba igual. Mejor hubiese sido llamarla "tarta loquehayenlaheladera".
Cuando pasaba algo que nos ponía tristes, enseguida nos llevaba al parque, o a jugar a las cartas al living de casa, el que muchos años después entendí que era su pieza. Que había cedido la única habitación del hogar -hasta que hubo plata para remodelar- para mi hermana y para mi.
Pero cuando se lo menciono hoy, dice que "no era para tanto" y se rie.

Madre tiene un berretin, tiene muchos, pero tiene uno en especial que es parte de sus engaños que me hace escribir hoy.
Cuando de pequeñas nos sobreexcitabamos por algún plan, un cumpleaños, un campamento, un viaje, ella nos decia: "Mira: hoy es lunes tenes escuela. Mañana es martes y cuando salis de ingles ya dormis y es miércoles. Te descuidaste y es jueves y al otro día ya te vas".
Si esto fuera un tribunal, no iria presa por engaño. Técnicamente era cierto. Lo que nos armaba, era una cuenta regresiva ficticia cual utopía, esa que dice Galeano que sirve para caminar.
Hoy tengo un amor que veo los fines de semana. Y no puedo mas que sonreir cuando llego el lunes a casa, y empiezo a decirme: "Lunes tengo ocupado todo el dia asi que recien se cuenta el martes que pasa volando porque a la tarde tengo guitarra..."
Los caminos que te forman.
Caminos que construyen.
Mentiras disfrazadas que ayudan a armar(se).
Bienvenidas sean.

miércoles, 12 de febrero de 2014

Pequeñas obsesiones ilustradas

Tengo un ritual.
Tengo muchos rituales, si no fuera tan parecida a Dora, sin lugar a dudas sería el Hombre de las Ratas.
Qué estructura podríamos encontrar en estado de pureza? Qué histérica no tiene alguna obsesión y qué obsesivo no es un poco insatisfecho?
Pero esto es parte de otro relato.
Lo cierto es que, repito, tengo un ritual.

Los objetos mas preciados para mi son los libros. Es una especie de fetiche mezclado con nostalgia. Uno de los pocos fetiches que tengo, una característica mas de mi nostalgia.
Tengo, al lado de la cama, un mueble que hace las veces de mesa de luz (qué nombre ese, como si la mesa no estuviera hecha de madera, como aquellos que piden en los bares "un vaso de agua") y que me permite acumular libros por la cantidad de estantes que tiene.
Pero no cualquier libro. No crean que mi rituobsesión es tan sencilla.
Sólo libros que he comprado -por lo general- complusivamente, y que todavía no he leído o no he terminado.
En fechas de cumpleaños y Navidad (ambas muy cercanas entre si) la pila aumenta notablemente.
En fechas de vacaciones o menor cantidad de trabajo la pila disminuye del mismo modo.
Pero esto no es parte del ritual.
O si, pero no es su punto cúlmine.

El momento mas bello, alegre y triste a la vez (no son acaso siempre asi?), es cuando termino la lectura de algún libro, y tengo que elegirle un lugar en mis bibliotecas.
Es un ritual que adoro y sostengo.

Y hoy pensaba, que un poco así son las relaciones.

Uno las mantiene en determinado sector, del cuerpo, de la intelectualidad, de la subjetividad y a veces, es necesario moverlas.
No generar nuevas.
No dejarlas a medio terminar.
Moverlas.

Porque, aunque aconsejo algunos rituales, es sumamente complejo elegir un lugar para algo y dejarlo allí: estanco, bloqueado en su intensidad, sin posibilidad de crecer, de multiplicarse y, porqué no, de huir.
Claro, no estoy lista para soltar mis rituales, mi nostalgia y algunas relaciones.
Solo voy a intentar de(s)velarlas, porque, y esto es profundamente irrefutable, cuando ves algunas verdades, ya no es posible volver a cubrirlas.
Lo que no se, es qué voy a hacer con el rincón de casa que esta lleno de los velos que estoy acumulando y ya no sirven.
Espero no dejarlos ahi juntando polvo, como hago con algunos libros, sólo por el hecho de no soltar, aunque ya no los lea y no pueda aprender nada de ellos.